La Cuchara de Valentina: «Nuestro éxito está en ofrecer comida casera de calidad en raciones generosas»

La Cuchara de Valentina: «Nuestro éxito está en ofrecer comida casera de calidad en raciones generosas»

El restaurante La cuchara de Valentina ha conseguido conquistar el estómago de los bilbaínos gracias a sus originales platos y un servicio basado en el cariño y la máxima atención al cliente. Aitor y Estrella, sus gerentes, revelan a EUROTAX ABOGADOS los secretos para crear un negocio fructífero en plena crisis económica.

¿Por qué decidisteis bautizar este local como ‘La Cuchara de Valentina’?

Estrella – Le dimos muchísimas vueltas al nombre. Lo cierto es que lo decidí yo pensando en que necesitábamos un nombre original, diferente y que se identificara con el tipo de local que queríamos crear. En ese momento nació la hija de mi sobrino y la llamaron Valentina. Yo fui su madrina, así que pensé en rendirle un pequeño homenaje bautizando el restaurante con su nombre. Cuando se lo comenté a Aitor le encantó y también a nuestro arquitecto y amigos, porque además suena romántico y encaja perfectamente con el estilo de nuestros local.

Este restaurante ha surgido en plena crisis económica, ¿cuál ha sido vuestra particular receta del éxito?

Estrella – Yo soy licenciada en periodismo y me dediqué durante muchos años al mundo de la decoración. Trabajé en varias empresas dentro de este campo y en verano hacía sustituciones en el sector de la hostelería pero me quedé en el paro. Fue entonces cuando entré como pinche en un restaurante y conocí a Aitor.

Aitor – Yo tenía mucha experiencia en el sector de la hostelería pero estaba cansado de trabajar siempre para otros y me di cuenta de que Esperanza era muy buena en la cocina. Tenía plena confianza en ella y la animé a que montáramos un restaurante: ella en la cocina y yo en la barra.

E – Fue un momento muy complicado, sobre todo para pedir créditos, pero Aitor tenía muchos contactos de proveedores y yo conocimientos en decoración, por lo que fue un tándem perfecto para comenzar. Además, yo no quería poner el restaurante en cualquier local, quería que fuese un lugar especial con el que me identificara. Alguna vez había estado aquí, cuando lo regentaba otra persona, y siempre sentí que algún día este local sería mío.

A – Vimos varios locales y ninguno nos convencía, pero cuando Esperanza entró en este le encantó y dijo: «Este es el sitio». Ella es muy intuitiva y yo soy más práctico.

Actualmente ofrecéis una amplia carta de productos, ¿cuáles suelen ser los platos más demandados por vuestros clientes?

E – Independientemente de que tengamos un plato especial, hay algunos que todos los clientes que vienen suelen probar. Es el caso de la ensalada Valentina, las sartenadas, los jibiones, los calamares gigantes rellenos de tinta o el bacalao al horno son algunos de los platos que triunfan mucho.

Nuestro pequeño éxito es que ofrecemos una comida casera con gran calidad: muy elaborada y con raciones generosas. Nuestra comida está hecha con cariño y cuidando la presentación porque mucha gente come con la vista.

¿Cómo ha sido la acogida del público bilbaíno durante estos primeros meses?

E – Hemos tenido muchísima gente desde el primer día, gente muy fiel. Muchos vienen dos y tres veces por semana, ya sea para menú diario o para menú especial. Lo cierto es que en la inauguración no escatimamos en nada porque queríamos que hubiese de todo: grupo de música, cortador de jamón…Fue impresionante la cantidad de gente que vino y durante nuestro primer día de apertura tuvimos el local lleno. Fue un arranque muy fuerte.

A – La verdad es que nos sentimos unos privilegiados por el local que tenemos y la clientela que hemos conseguido en este momento tan complicado para muchas personas.

Esperanza – Reconozco que nos metimos en esta película sin plantearnos nada y el tiempo ha demostrado que en nuestro local la gente está como en casa porque hay muy buen ambiente. No soy la típica cocinera, yo siempre salgo a saludar con una sonrisa y eso es algo que a los clientes les gusta mucho. Intentamos que aquí la gente desconecte, se sienta a gusto.

En apenas unos días cumplís vuestro primer aniversario, ¿cuál es el balance de este año de vida?

E – El próximo 22 de mayo es nuestro primer aniversario y tenemos pensado algo especial. Probablemente la haremos el viernes de esa misma semana por la noche y queremos que venga alguien a cantar mientras la gente cena tranquilamente. Haremos una fiesta con canapés, pequeña y especial.

¿Qué tipo de clientela os ha visitado durante este primer año?

E – Principalmente de nivel económico medio-alto. La mayoría son políticos, directivos, o empresarios, aunque al cabo de la semana nos visita gente de todo tipo. El fin de semana, por ejemplo, suele venir mucha gente de Las Arenas o Leioa. Creo que ellos nos eligen por la relación calidad-precio que aquí tenemos. La mayoría de los restaurantes de la zona ofrecen sota, caballo y rey en sus menús, pero en La Cuchara de Valentina les sorprendemos; les damos un gran ambiente, un local acogedor y siempre estamos con una sonrisa. Nosotros hemos roto con la idea de mesón de la zona.

A – Uno de nuestros éxitos con los clientes es que no tenemos precios caros y ofrecemos raciones generosas. Incluso los jóvenes, aunque no tengan mucho dinero, también nos visitan porque quedan satisfechos.

Además, la gente nos dice que ponemos unos cafés muy buenos y también hacemos encargos de comida para el fin de semana como por ejemplo tortilla, que tenemos más de veinte variedades.

¿Tenéis pensado poner en marcha nuevas iniciativas en el local?

E – En el futuro queremos seguir avanzando. Mi intuición no me falla casi nunca y no soy conformista, todo se puede mejorar y me gusta evolucionar. Hay cosas que no vamos a cambiar, como nuestros productos frescos, las raciones grandes y la búsqueda de la satisfacción total del cliente.

Página web de La Cuchara de Valentina

Arantza Gómez Larreina
Departamento de Comunicación

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